París 2024 está a punto de enfrentar uno de los mayores desafíos en su historia: garantizar la ciberseguridad durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos que se celebrarán este verano. Con la fecha de inicio programada para el 26 de julio y el 28 de agosto respectivamente, los organizadores están preparándose para hacer frente a una presión sin precedentes por parte del crimen organizado, activistas y estados.
La magnitud de la tarea es evidente: 500 sitios de competencia dispersos por toda la ciudad, cada uno representando un potencial punto de vulnerabilidad. En respuesta a esta compleja realidad, París 2024 ha estado colaborando estrechamente con la Agencia Nacional de Seguridad de la Información (ANSSI) de Francia, así como con empresas líderes en ciberseguridad como Cisco y Eviden.
Uno de los pilares fundamentales de esta estrategia es la creación de un centro de ciberseguridad, cuya ubicación se mantiene en secreto por razones obvias. Este centro servirá como punto de control centralizado desde el cual se monitorearán y gestionarán las amenazas cibernéticas que puedan surgir.
Pero la preparación no se limita a la infraestructura física; París 2024 ha adoptado un enfoque proactivo al contratar "hackers éticos" para poner a prueba sus sistemas de seguridad. Además, están utilizando inteligencia artificial para identificar y clasificar posibles amenazas, lo que les permite distinguir entre molestias menores y potenciales catástrofes.
Franz Regul, director general de TI de París 2024, destaca la importancia de este enfoque integrado: "La IA nos ayuda a marcar la diferencia entre una molestia y una catástrofe". La expectativa es que el número de eventos relacionados con la seguridad cibernética se multiplique por diez en comparación con los Juegos de Tokio 2021.
En resumen, París 2024 se enfrenta a un gran desafío en términos de ciberseguridad. Sin embargo, su colaboración con expertos en el campo y su enfoque proactivo destacan su compromiso con la seguridad de todos los participantes y espectadores. Este esfuerzo sin precedentes no solo subraya la importancia crítica de la ciberseguridad en la era digital, sino que también demuestra la determinación de París 2024 de asegurar unos Juegos seguros y exitosos.