En AltaVoz estamos permanentemente ocupados en mejorar nuestras fronteras digitales, lo cual se traduce en monitorear, detectar y solucionar vulnerabilidades. Son tareas no siempre sencillas, que implican un constante aprendizaje en los más diversos temas, junto a un enorme esfuerzo para mantener todos los sistemas al día.
Los desafíos son significativos y por eso nos apoyamos en servicios especializados, como los de Adaptive Security, pero resulta muy gratificante descubrir que en esto también hay buenas intenciones y apoyo (podríamos calificarlo hasta de compañerismo) de terceros.
Nos ocurre con relativa frecuencia que personas sin ninguna relación con nosotros nos avisan de algún incidente, como nos pasó recientemente con Ronak Nahar, quien abiertamente y de forma muy profesional nos ha revelado un problema de configuración en uno de nuestros sistemas, entregando desinteresadamente toda la información requerida para ayudarnos a resolver el caso de manera rápida.
En nuestro país destaca el trabajo de Nivel 4, quienes liderados por Fernando Lagos han alcanzado un altísimo nivel y han sido siempre muy generosos al compartir sus conocimientos, ayudándonos frecuentemente a prevenir y solucionar problemas de seguridad.
Desde AltaVoz valoramos y agradecemos la iniciativa de estas personas, y trabajamos rápidamente para dar solución a los problemas que nos han dado a conocer. Sin duda estos gestos revelan el lado amable de la red y su rol como constructora de relaciones. Este tipo de colaboración es muy importante para lograr una Internet más segura para todos.
