Search Engine Optimization (SEO) corresponde a las prácticas que permiten incrementar la cantidad y calidad de visitantes que llegan a un sitio web a través de búsquedas orgánicas en motores de búsqueda, como Google.
Vale la pena entrar en algunos detalles respecto de la definición anterior.
- Calidad del tráfico: Se refiere a que el objetivo es atraer visitantes que están realmente interesados en el sitio web y lo que ofrece. Si un usuario llega al sitio engañado y no encuentra información útil, es una visita de mala calidad que se irá de nuestra web para no volver.
- Cantidad de tráfico: Una vez que llegamos a las personas correctas, obtener más tráfico es lo que se espera lograr.
- Búsqueda orgánica: Se refiere a aquellas búsquedas que no son pagadas (diferentes a poner publicidad en Google).
Cabe también reiterar que el SEO actúa en relación a los motores de búsqueda, y no sobre otras plataformas como redes sociales. El trabajo de SEO incluye una parte técnica y otra de contenidos, buscando presentar de forma clara nuestro sitio web a los buscadores y a los usuarios.
Los objetivos principales son básicamente dos:
- Hacia el usuario: Cuando un usuario hace una búsqueda en Google, los resultados de búsqueda deben entregarle información clara y concisa respecto a qué es lo que hay en el sitio web. La idea es que el pequeño resumen que le entrega el buscador le permita al usuario decidir si vale la pena hacer clic en ese enlace o no. Aquí es clave la redacción de títulos y descripciones especiales para Google, que sean claras y entreguen la información necesaria al usuario.
- Hacia el motor de búsqueda: La clave para lograr un buen SEO es que el buscador sea capaz de entender nuestro sitio web y su contenido, de manera que cuando alguien hace una búsqueda, lo pueda entregar como resultado a los usuarios. Para esto debemos cumplir con estándares y buenas prácticas que le permitan a los robots de los buscadores navegar nuestro sitio y comprender el tipo de información que contiene.
Los buscadores utilizan una serie de algoritmos para determinar cómo ordenar los resultados de búsqueda. Estos algoritmos son constantemente actualizados por las empresas como Google, buscando entregar mejor información a los usuarios. Con los cambios se busca combatir aquellos sitios que hacen spam, que utilizan prácticas dudosas para tratar de engañar al buscador y a los usuarios, o que entregan una mala experiencia al usuario una vez que hace clic (son muy lentos, el contenido no carga bien, etc).
Por esta razón, las prácticas de SEO no son una fórmula mágica. Requieren de tiempo y la aplicación de buenas prácticas a nivel general en el sitio, para la parte técnica, contenidos, publicidad y más.
